09 abril 2008

¿Seguros Bancomer? Más bien, inseguros Bancomer.

Ayer mientras regresaba del trabajo a mi casa, estaba en mi auto, detenido esperando a que avanzaran los otros, cuando sentí que un carro se impactó por atrás contra el mío.

Me bajé a revisar el golpe, vi que el frente del carro se había metido un poco en la parte trasera del mío. Al reclamarle al conductor por haberme golpeado, me dijo que él a su vez, había sido proyectado por otro auto (un Neón). El conductor de este último también se bajó y reconoció haber llegado muy rápido y ser el responsable de percance. Llamó a su seguro.

Estuvimos esperando hasta que llegó el ajustador, quien revisó los golpes y determinó que no correspondían con lo que se le dijo que sucedió.

Simple y sencillamente, no quiso hacer válido el seguro.

Durante casi tres horas (hasta las 2 de la mañana), estuvimos explicándole y analizando la dinámica del siniestro y el porqué habían sido las cosas como sucedieron, aunque él no lo creyera, pero simplemente se cerró a que no correspondía.

¿Qué hacer ante la necedad de esta persona?

Por supuesto, emitir una queja ante la compañía aseguradora, reportarla a la PROFECO y lo más importante, para un futuro, no adquirir seguros con compañías tan irresponsables como en este caso lo está siendo Bancomer.

07 abril 2008

Mexicanos muertos en Ecuador.

En una incursión, el Ejército Colombiano atacó una célula del grupo, yo digo terrorista, Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC.

En este suceso, eliminaron a uno de los principales líderes de las FARC, Raúl Reyes, además de otros colombianos integrantes de este grupo armado.

Como consecuencia de este ataque, también abatieron a algunos mexicanos e hirieron a otra más.

Las ideas, comentarios y posiciones con respecto a este asunto son encontradas entre sí. Para unos, esos muertos ya son mártires de guerra, mexicanos ejemplares que injustamente acabaron como víctimas de un conflicto en el cual nada tenían que ver.

Para otros, no eran más que izquierdosos. Insurrectos revoltosos sin oficio ni beneficio.

Mártires o no, inocentes o culpables, lo ignoro. Cada quien podrá formar su propia opinión al respecto.

Yo, de ninguna manera celebro su muerte, pero de algo estoy seguro: niños no eran.

Eran adultos que sabían bien lo que hacían. Sabían bien a donde iban y con quienes iban.

Porsupuesto que conocían los riesgos que implicaba ir con un grupo terrorista y pese a ello, decidieron ir. Es más, recordemos que hasta uniforme de las FARC portaban.

Así que para mí, están muy lejos de ser los mártires que muchos pretenden hacernos creer.

03 marzo 2008

¡ R E C O M P E N S A !

Últimamente he meditado acerca de algunas características propias de los mexicanos, no obstante el mucho tiempo invertido para el análisis de estas cuestiones, no logro encontrar respuesta alguna. Es por esto que decidí recurrir a usted. Si consigue ayudarme, obtendrá una valiosa recompensa. Para esto le plantearé algunas de las preguntas que pululan en mi mente:

¿Por qué un país tan vasto como el nuestro, con el potencial de recursos naturales que posee, está pasando por una crisis económica tan severa?

¿Por qué entre millones de personas, quien nos gobierna es precisamente la gente más deshonesta, falaz, insensible y corrupta que puede existir?

¿Por qué nos enorgullece embriagarnos? ¿No deteriora a nuestra imagen? ¿No afecta a nuestra economía? ¿No daña a nuestra salud? ¿No perjudica a nuestras relaciones sociales y familiares? Entonces ¿Por qué nos envanece y hasta presumimos al hacerlo?

¿Por que dedicamos horas y horas al fútbol, a su debate, a sus jugadas, etc., como si eso fuera verdaderamente importante o trascendente en el rumbo del país?

¿Tan relevante es la vida personal de los “artistas” que nos interesa si visten de una forma u otra, si declaran una cosa u otra, si inician una relación con alguien o la rompen, si comen algo especial, si se casan, divorcian, etc.?

¿Cómo es posible que se disfrute de la mayoría de programas de televisión que en casi todo momento son captados por nuestros aparatos televisores? Programas en que podemos apreciar concursos estúpidos con participantes dispuestos a ridiculizarse con sus atavíos o sus acciones, verdaderos imbéciles con micrófono en mano que por proferir frases con doble sentido o bromas tontas, cobran en un breve momento el sueldo que a un campesino le costaría largas jornadas de arduo trabajo, o mejor dicho, que un campesino jamás obtendrá.

Considero que cualquier persona con criterio o cuando menos con un poco de amor propio, se abstendría de este tipo de actividades o haría algo para cambiar esta situación. Sin embargo, con profunda tristeza me doy cuenta de que millones de personas somos quienes participamos en estos errores y no hacemos nada por evitarlo.

Por favor, analice las cuestiones anteriores y si encuentra las respuestas, recibió entonces una recompensa, la gran recompensa de tomar conciencia de nuestra dolorosa y lastimera situación. Tal vez ahora puede empezar a realizar acciones concretas para enriquecer nuestra vida, la vida de millones de mexicanos que necesitamos urgentemente un profundo cambio.